jueves, 18 de noviembre de 2010

Sin descanso

Será la falta de sueño. Esta noche el descanso no quiso envolverme, y ya desde antes de incorporame iba arrastrando los pies. Si, es el cansancio, seguro. No tiene otra explicación. No, no puede haberse agotado todo ese torrente de energía en un suspiro. La lucidez no se va en los vuelos de una ráfaga de viento. La mirada acerada y precisa no se desafila por tener que pasar infinitas veces entre las pestañas.

Sí, sin duda es el cansacio. Pero he vuelto a poner a Bil Evans durante todo el día. Me rodeo con esa suavidad que suena a derrota, a dulce derrota.Y me invade la sensación de que el destino si existe, y todos tenemos uno.....y no podemos hacer nada para huir de el. No.No es cierto. No es debilidad. Tan sólo, que estoy cansado. Pero ¿por qué esa música activa los mismos circuitos que quiero desconectar en los breves foganazos de consciencia? No se, es más cómodo dejarse llevar. Dejar de hacer. Sí, claro que sí. Es que estoy cansado. ¿Cómo no me di cuenta antes?

Cansado, sí, pero ¿de qué?

Polka dots

Estoy tirado en el sillón, y me baña la luna con sus rayos...siento el polvo de la presencia que se fue, y siempre estará.

Mañana, si consigo dormir, todo lo que pasó por mi mente me parecerá irreal. Pero eso será mañana.

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