lunes, 31 de julio de 2017

¿Cómo entregarte a quien no amas?

Sintiendo el impulso de hacerlo. Sabiendo que el deseo que te devora por dentro requiere de esa entrega. Ese deseo puede ser motivado por algo imaginado que se presenta como posible, por mera curiosidad, o por un instante de inspiración o de inconsciencia.

Con todo, suele tener como síntoma un vacío en el vientre, y una visión diferente a la habitual ante una situación, una presencia, una propuesta, una idea o todo ello a la vez.

Si me hubieras preguntado por qué, no tendría respuesta. Tras todos estos años sin atisbar siquiera la razón, he renunciado a saberlo.

Pero cómos....he experimentado tantos y tan diferentes que ya no pongo condiciones previas. Bueno, sí, sólo una. Que lo que preveo me "ponga" de ese modo tan diferente que conforma el aroma de esta página.

El resto viene solo. Si se comparten las sensaciones ante el estímulo. O debiera venir.

A veces se leen preguntas interesantes. E incluso dan lugar a conversaciones desdramatizadas y atractivas. Qué bien.

martes, 25 de julio de 2017

Usarte

Quisiera usarte. Siento el impulso de ello, y de más, algo inconcreto aún aunque con una promesa vaga de aroma a posesión fundamental, sin falsos brillos ni retórica superflua.

Deseo usarte, agarrándote del pelo, llevándote de la correa, cubierta de cadenas.

Usarte. Sin fin.

lunes, 24 de julio de 2017

Limpieza

Llevo años viendo esa imagen de trazos limpios, delineados, en apariencia claros, que sin embargo encierran una mente sucia, un deseo intenso de tintes degradantes, un aroma de puta de lujo arrojada al arroyo del arrabal, en la que la mugre que origina su placer brilla la mirada limpia de la perversión más oscura.

La zorra oculta que no se niega ante quien ha de abrir su alma limpia camino de la corrupción.

La zorra cansada de no serlo,queriendo ser. Una vez más.

sábado, 22 de julio de 2017

Consistencia

Una invitación requiere consistencia. Aunque sea para negarla.
Bueno, te consolará saber que fuiste como la mayoría.

A mi me tranquiliza, pues no quiero lo que la mayoría da.

martes, 18 de julio de 2017

Poco estilo

El placer de conocer, invitando a mostrar implícitamente, entrando por los flancos y buscando la inevitable ventana que da acceso al interior del otro.

Sin apresurarse y sin dejar que la tensión caiga, antes al contrario, creando un crescendo sutil e irrefrenable.

Pero sí, hay tan poca paciencia como exceso de amor por lo obvio, tan pocas ganas de mostrarse como falsos pudores gregarios y paletos , tan poca disposición real como insufrible exhibicionismo de folletín.

Tan poco estilo en definitiva.

martes, 11 de julio de 2017

Me pone

Me pone ver que tu primera línea está dedicada a decir lo que te pone. Y me pone que te ponga una mente inquieta. Que tengas las neuronas abiertas para que pueda penetrarlas sin necesidad de tocarte. Unas neuronas activas, curiosas, lascivas y húmedas.

Me pone pensarte excitada mirándote a los ojos, ofreciéndote al destello que brilla detrás de ellos, y que la piel vaya detrás.

Me pone la sencillez que no se niega a si misma.

Me pone como te presentas, y lo que prometes sin decirlo.

Me pones.

Últimamente, ¡qué mal elijo!

domingo, 9 de julio de 2017

Tentación

Ni siquiera hay tentación.
Cuando aparece es puro deseo.

No me llama. Ni me provoca.
Brota de dentro, sin avisar.

No necesito conocer.
Lo sé; con mirar, oler, palpar, oír, paladear....lo sé.

No hay tentación. Simplemente, es así.

lunes, 3 de julio de 2017

Cadenas

Deseando verte columpiándote sobre la cadena,
a horcajadas sobre ella,
apenas sujeta por la punta de los dedos,
vacilando entre el deseo de soltarte
y el temor de hacerlo.

Inmóvil, con los eslabones
marcando la piel,
incrustados en tu sexo,
pendiente de un equilibrio sutil,
con el dolor cierto de mantener la postura
y el prometido que vendrá cuando cedas.

El viento te acaricia,
el sol te quema,
mientras que el sabor de la sal
se confunde con tu sudor
y aroma inconfundible que sube
de losmuslos tensos,
prestos ya a vencerse
en el suave balanceo
que anuncia con partirte en dos,
entre el descanso y el dolor del deseo.

Deseo que la cadena tire de ti,
y no puedas evitarlo.