jueves, 29 de diciembre de 2022

¿Ya no hay perversión?

 

Hay poca. Sobra estética y falta esencia.

La sensación de que puede ocurrir cualquier cosa, de que todo es posible.

La perversidad esa que emana de una mirada, una palabra, un gesto....¿dónde estarán?

 

Coda primera

La hay, la hay. Desfigurada por mil lentes amorfas, disimulada tras banderas absurdas, pero la hay. Ocurre que es tan tímida, y gusta tanto de protegerse de la luz, que apenas se percibe entre tanta contaminación.

Pero ahí está, esperando cruzar la mirada contigo.

Impagable perversidad.

 

lunes, 19 de diciembre de 2022

Donde el tiempo está vivo todavía

¿Dónde es?
Si escolta a la eternidad, tiene que estar ahí.
Si se mece en la infinitud, tiene que estar ahí.

Solo espero que al no ser ni infinito ni eterno, ese lugar no haya quedado atrás.
Pues si así fuera, pasaron todos mis momentos, por mucho que queden muchos por llegar.

¡Qué melancolía tan extraña trae la certeza de saber que ya no queda tanto para el final!

Pregunta tonta

¿Existe el sumiso perfecto?

Vaya pregunta más tonta. ¡Pues claro que existen!
Cada una de las que he disfrutado, mientras las tuve, mientras fueron, fueron perfectas.
Aunque durara cinco minutos.
La perfección absoluta. La lástima es que no suele ser eterna.
Así pues, sí, existen. ¡Faltaría más!

Dedicado a un perfecto idiota de Valladolid

lunes, 5 de diciembre de 2022

Tengo muchas....

Tienes muchas......, muchísimas. Tan acumuladas durante mucho tiempo, una encima de otra, tantas que ya no te cabían más.

Sí, sí que tienes. Y ahora, te has desbordado, puta. Lo has soltado todo de repente. No te veo, pero sientes que te vigilo. Eso te parece, sí, tanto que noto como sonríes, con esa risa boba tan señalada y única. Noto tu lenguaje corporal, que te delata inevitablemente, tan evidente que emana de ti la sensación de bienestar que te genera estar tan cómoda en tu condición de puta servil y a la vez satisfecha. La humedad constante entre las piernas, el coño mojado, los andares seguros, el gesto amable....

Tienes muchas, muchísimas. Y tendrás más. Claro que sí.