sábado, 23 de diciembre de 2023

Empatía

 

Se define como “identificación mental y afectiva de un sujeto con el estado de ánimo del otro”; en una segunda acepción, la explica como la “capacidad de identificarse con alguien y compartir sus sentimiento”.

¿De verdad existen sumisos que esperan tal comportamiento de su Dominante?

Y...¿algún Dominante que se precie considera apreciable y sustancial esa capacidad?

Por lo que puedo leer, me temo que sí. Aunque, probablemente, quieren decir otra cosa.

Para los buenistas iletrados, observen la semántica de "identificarse" y "compartir".

miércoles, 20 de diciembre de 2023

2013

 A veces parece que fue ayer. Es curioso como lo cotidiano se pone en un primer plano, y los detalles de hoy difuminan sin piedad a los del pasado. Lo hacen de tal manera que la memoria se adapta a lo que actualmente vivo, escondiendo lo que viví. Es necesario que algún matiz exclusivo del ayer retorne con viveza, sin dejarse contaminar por el presente, para que broten las sensaciones de antaño.

Caí, sin premeditación alguna, por una entrada escrita en el año 2013. Y me tomé el tiempo de revisar con calma aquel año. Para empezar, me sorprendió algo que no me había percatado antes. Entre enero y diciembre escribí nada menos que ¡172 entradas! Casi el doble que el siguiente periodo más prolífico. 

 Es cierto que del 12 al 14 fue un trienio asombrosamente fecundo. Pero, aun siendo significativo, no es eso lo más reseñable. No. Lo que verdaderamente me sorprendió fue el aroma que desprende cada entrada, cada línea. Y lo asombroso es que no recordara con viveza ese aroma. Aroma que en ocasiones disfruto, pero entonces era preeminente. Omnipresente, diario, cotidiano. Una cotidianeidad que sí, está muy alejada de la actual. 

Menos mal que siempre tuve claro que no iba a ser siempre igual. Aunque a veces, mirando atrás, no me importaría ser el de alguno de esos días. Aunque posiblemente, hoy me agotaría. Por mucho que quiera creer otra cosa.

2013 fue excelente. Igual en el 33 pienso lo mismo de este año. Quién sabe.

sábado, 16 de diciembre de 2023

Para verlo solo has de mirar

 

Andaba a ciegas. Con el desasosiego que provoca intuir con cristalina claridad y no saber cómo llegar.

Es más, "lo sabes" y a la vez dudas de que pueda existir. Parece una cuestión de fe imposible de materializar. El deseo de iluminación, tan íntimo, se convirtió paulatinamente en el ansia que no deja de torturarte.

Necesitabas ser.

Y conseguiste ser. En una calmada orgía que te enseñó a percibir.
Con una exaltación de los sentidos, de modo que fue como llegar a Dios, alabarlo, aceptarlo, quererlo.

Entre fugas, cantatas, oratorios y preludios, oscuridad y tacto, el aroma a divinidad condiciona percepción y respuesta, alineándolos con el impulso esencial que te hizo venir hasta mí.

Ahora que no puedes ver consigues entender en que consiste mirar.

Estaba tan cerca, ¿verdad?

miércoles, 6 de diciembre de 2023

El vicio

 

El vicio no espera.
Corroe en ausencia, consume en presencia.

Inevitablemente corruptor, ya sea excitando el pensamiento, manchando la palabra, mojando la obra o desesperando en la omisión.

Nunca espera. Y nunca te deja. Una vez te toca, quedas manchado para siempre. Adicto a la suciedad del alma.

Aunque nadie lo sepa, y solo tú puedas verlo.

Degradación eterna.

miércoles, 29 de noviembre de 2023

De los grados del ser

¿Te hace lo circunstancial ser más o menos en esencia? No, solo en probabilidad.

Las circunstancias pueden modularse. La capacidad del ser, no. Puedes o no puedes ser. Sin más.

Esta disquisición vio la luz a causa de encontrarme por enésima vez con la cargante cuestión de ser buen o mal sumiso. Y no creo que nadie deba martirizarse por algo que está fuera de su alcance. Como mucho, podría preocuparse de tener la adecuada disposición o convencimiento. Pero crear las circunstancias que le permitan ser en toda su extensión no están de su mano. O no debieran estar, pues entonces, está detentando el "sometible" parte de las funciones que corresponden al "sometedor". Y no se trata de eso.

domingo, 26 de noviembre de 2023

Supernova (Universo consumido)

 

"Por eso, al recorrer con el dorso de las uñas el interior de tus brazos, abres más las piernas y dejas caer la cabeza invitándome involuntariamente a que lo ponga de nuevo derecho, asiéndote el pelo, y dejando tensa firme la piel del cuello, expuesta, vulnerable.

El aroma del deseo, de la mente pervertida, curiosa, incitante, dispuesta. Inunda la estancia, sin haber llegado a tocarte, apenas rozarte.

Esos labios deliciosos acarician tus lóbulos, oyes la respiración, esperas un sonido que te dirija, te lleve. No hay obligación, pero tampoco voluntad. Empiezas a notar que no necesitas dejarte, vas, y más aún al sentir el suave mordisco donde antes había caricia.

Anticipas, tensa, algo. Un contacto, una palabra, una indicación. El pelo tirante, la piel erizada, las piernas abiertas, la ropa empapada.....

.......y privada de la visión, el tacto, el oído, el olfato....se disparan. Y cuando lo que parece el envés de la mano dibuja tus labios abres la boca, queriendo saborear ya algo de ese intruso que amenaza con invadirte, entera."

Después, un clímax que pareció infinito, pero que apenas explotaba al tragarse de golpe toda la energía que engendró. Deja una bella espiral, y los trazos de una húmeda y aromática intensidad.

¿Puedo pedirle algo?

Es magnífico. Por forma, amplitud, simetría, tono, consistencia.....la voluptuosidad encarnada, trascendiendo incluso el fetiche. Y sensible. Extremadamente sensible.

Ya el obligado instante de tomar la cuerda y hacerla deslizar entre los dedos en toda su longitud, tomando los cabos, se convierte anticipadamente en un acto placentero. El tacto, el olor, el suave sonido del trenzado entre las yemas sensibles son preludio de incitante momento que va tomando forma.

Tras inclinarse ligeramente hacia adelante, sopeso tan divina plenitud, provocando al instante la atención de los pezones, y el no menos delicioso estímulo de las aureolas, que adquieren esa rugosidad propia de los momentos de alta excitación. Las recorro lentamente, con la cuerda ya en la mano, aumentando la dureza, el relieve, la tensión, dejándolas listas para proceder.

Procedo, sin prisa, dejando fluir la cuerda entre los dedos, acomodando la carne plena y palpitante con el dorso de la mano, de ese modo que no por conocido deja de ser único en cada ocasión, y más cuando, como es el caso, se trata de su primera vez.

Los suspiros de excitación y temor se mezclan conforme aumento la tensión hasta el límite justo que es capaz de asimilar (pues, aunque aún no lo sabe, pero pronto lo hará, puede soportar más, mucho más). Nota como la presión es constante y siento como el temor desaparece para dar paso a la intensidad, el deseo sensible, el placer de romper una barrera y dejarse llevar.

Cuando se encuentran los cabos de la cuerda y el nudo que los une da el último toque a la fijación, hace tiempo que sus ojos miran sin ver. Pero lo dicen todo al notar el peso suspendido, flotante, turgente, descansar pulsante sobre mis manos, que acarician con suavidad la redonda calidez que comienza a tomar un tono violáceo, testigo de una intensidad que no para de crecer.

Bastantes minutos después, mientras recorre con un gesto entre malicioso y divertido las marcas del trenzado sobre la base de tan magnífico pecho, me hace la pregunta:

"¿Puedo pedirle algo?"

No es difícil adivinar qué va a ser.

 

sábado, 25 de noviembre de 2023

Retos

 

"¿Me está Usted retando?", pregunta con ánimo belicoso.

"No. En absoluto. Espero de ti una entereza de carácter, intelectual y de espíritu que no necesite de una excitación provocativa para apreciar el interés de lo que se abre ante ti.*

Los retos son para los displicentes, bravucones, triviales y carentes de profundidad. Aburridos egoístas, en definitiva. No me interesas como respuesta a un desafío. Te quiero como resultado de un deseo inevitable.

viernes, 10 de noviembre de 2023

Placer abstracto

 

¡Qué gusto me das!
Hablamos el mismo idioma hasta en el silencio.

o de los caprichosos encuentros que trae la infinitud del Universo

No puedo

 

No, no puedo. Nunca los he tragado.
Y cada día puedo menos.

No puedo con las mentes cortas, obtusas, literales, de filosofía de epigrama y trazo grueso.

No, no son sencillos, ni les justifica la simpleza, ni siquiera en el hipotético e improbable caso de que no sean conscientes de tamaña limitación.

No, no puedo cuando airean su incapacidad exhibiendo patéticamente tan denigrante falta de cerebro.

Y sobre todo, no puedo con que digan que tienen el derecho de decir lo que quieran. La simpleza mayúscula y suprema.

No, no tienen derecho a crear ese silencio incómodo a su alrededor, o las miradas de conmiseración. Y mucho menos, a provocar un solidario despliegue de simplezas cómplices al romper el hielo que un pudor intelectual mínimo había impuesto.

Si quieres ser un imbécil, por favor, selo en la intimidad. Que no todos los desnudos son apreciables.

lunes, 6 de noviembre de 2023

El coño acuático

Era un coño a un mar pegado.
Era un coño impulsivo.
Era un coño incapaz de controlarse.
Era un coño fluido.

Aunque decir esto último no es hacerle justicia.
Estaba directamente conectado a dondequiera que nace su placer.
Placer masoquista absoluto.
Cada brizna de dolor acumulada provoca un efecto exponencial.

Y en un momento dado, empieza a manar.
Sin límite, sin pudor, sin medida, sin fin.
Una vez comienza, pronto aparece la sensación que de no parar el estímulo, puede acabar disolviéndose.
Primero es una gota, luego un chorro, finalmente una cascada, y acaba bañada en un charco.

Y no, no se trata de una confusión con los líquidos. En absoluto.
Todo lo produce ese coño acuático interminable.
Aunque parezca otra cosa, no lo es.
Algún día tendré que probar que acaba antes, si la tolerancia al dolor o el manantial incontenible.

Mas me temo que ninguno de los dos tiene final.

 

domingo, 5 de noviembre de 2023

El coño rítmico

Se sincronizó de una forma asombrosa al ritmo suave, ligeramente sincopado , que sistemáticamente golpeaba entre sus muslos.Lo sorprendente venía precisamente del placer que creciente que experimentaba con cada impacto, certero, suave y constante, en su sexo, cada vez más mojado, más hinchado, más sensible, más excitado. Pues era algo totalmente nuevo para ese coño.

Pronto los gemidos pusieron un contrapunto sutil, al tiempo que las caderas poco a poco se acompasaban al palpitar de la carne de su sexo, tan rítmica y resonante, que hacía vibrar cada fibra de su ser.

Y, como no podía ser de otro modo, explotó. Al ritmo del coño, por supuesto.

 

El coño infinito

Nunca recibió otra cosa que no fuera una polla, dedos o una lengua. Aunque es cierto que la polla, según confesó, era de un tamaño considerable. Pero no tanto como para pensar que pudiera ser, sin acondicionamiento previo, tan sumamente acogedor. Bueno, hay que considerar también que poseía una sexualidad única, parecía naturalmente dotada para disfrutar del sexo sin límite. Así, cuando una situación le resultaba excitante, y esta lo era mucho, desplegaba una sensualidad intensa, brutal. Tanto que parece que los límites desaparecen todos y se antoja capaz de cualquier cosa.

Y, desde luego, su coño, lo es. Acogió sin mucho esfuerzo los dedos....3, 4....enseguida, en un abrazo mojado, caliente, envolvente, dilatado. Podría decirse que casi ansiosa si no fuera porque no había urgencia alguna, y se abrió natural y puntualmente a cada incremento del volumen que la estaba invadiendo. Y con esa naturalidad, engulló la mano entera, se acomodó a ella y admitió que entrara y saliera con absoluta fluidez y suavidad.....dentro de lo que era el ser brutalmente follada por un puño.

Un coño infinito. Imposible que haya otro igual.

viernes, 3 de noviembre de 2023

El coño insomne

No puede dormir.
Tan insomne, él. No puede cerrar los labios (uy, los párpados, será).
Nada, ni con un besito, ni con suaves caricias, ni con amenaza de azotaina, a mano o con zapatilla.
No se quiere dormir. Y llora, se le caen las lágrimas, húmedas, densas, perezosas.

Quizá necesite el chupete. No hay como los remedios clásicos.

Y a dormir.

lunes, 30 de octubre de 2023

El control por siempre jamás

 

"La sucesión de latigazos estallando sobre su cuerpo tendido la llevaron al borde de la explosión. Los azotes bastan para arrancarle el placer, por mucho que trate de evitarlo. Allí, sobre el potro de tortura, con las tetas fuertemente atadas, con esa tensión que acaba de descubrir y que les da ese tono violáceo casi estremecedor, apoyada sobre ellas en la superficie de cuero acolchado, lo que no hacía más cómoda la situación, pero sí mucho más estimulante. La cadena que une las pinzas que martirizan sus ahora ultrasensibles pezones no le ayudan precisamente en su intento de mantener a raya la ola de placer que amenaza con desbordarla. Y aunque lleva puestas las retenciones en sus cuatro extremidades, no hace falta fijarlas en los puntos que le impedirían todo movimiento, pues hace tiempo que sus dedos crispados están lívidos debido a la fuerza con que se agarran a la estructura que la sostiene.

Y si siente que se le va el hilo, solo tiene que girar la cabeza a la derecha, y contemplarse en el espejo: las piernas tensas, hacen brillar el nylon negro que hace que resalte la blancura de la piel, rota solo en aquellas zonas en las que el rojo es testigo de la piel castigada. Y puede ver como es violada por todos sus agujeros, convertida en un perfecto objeto de placer y dolor. Aún así, aguanta, y mantiene lo que cree que es algo de control sobre la situación...."

Me gusta el control.

Ejercerlo, hacerlo notar, inducirlo, crearlo, modularlo, tomarlo.
Me encanta. Sin duda, es lo que me tiene aún aquí.
Observar, identificar los puntos de acceso, elaborar una estrategia de aproximación, crear la necesidad de sentirlo, inducir el deseo, alentar la consumación, facilitar que fluya naturalmente.....uhmmm, sí, es delicioso.

Y sobre todo, disfruto llevando al receptor a terrenos donde jamás pensó que podían ser un espacio de cesión y rendición. Ampliar sus horizontes de tal manera que perciba que no habrá ámbito ni lugar en el que pueda abstraerse del influjo que le lleva a aceptar su inevitable destino.

".......Ella se tiene principalmente por masoquista. Desde esa plataforma, acaba llegando con el tiempo a ceder todo control, una vez que la aproximación personal le permitió ver que el carácter al que se enfrenta posee los atributos que le llevan a reconocer que está en la esfera adecuada de complicidad, seguridad, confianza y autoridad para dejar fluir su ser. Pero no deja de tener un punto de voluntad en su mano.

Está convencida de que podrá soportar la creciente intensidad sin ceder a la necesidad de llegar al clímax. No, no llegará a no ser que tenga permiso expreso para ello. Salvo que reciba la orden, no se dejará ir, así caigan mil azotes más, entre en su sexo el intruso mil veces más, las bolas de su ano sigan aumentando en volumen y profundidad, el sabor de su polla en la boca le inunde el paladar.....no, no cederá.

Tiene asimilada la situación, y sufre y disfruta a la vez. Así, cuando siente el tirón del pelo que le obliga a levantar la cabeza en un escorzo inverosímil, casi sonríe, lo estaba esperando. Lo que no adivinó a imaginar fueron Sus labios pegándose a los suyos. Su Lengua entrando, primero juguetonamente, haciéndola jadear, y después con violencia, haciéndola temblar. Y cuando sintió el mordisco en los labios, no pudo más, y explotó en un gemido brutal y ahogado, que empapó su muslos medias abajo hasta el suelo.

Y entonces supo que nunca, en ningún instante, había tenido el control. Y que probablemente, no lo volvería a tener jamás."

domingo, 29 de octubre de 2023

El norte está lleno de frío

 

El frío viene de la mano de la oscuridad. La humedad ominosa que corrompe el espíritu más virtuoso y el carácter más templado.

El norte está lleno de frío.

domingo, 8 de octubre de 2023

Patetismo interesado

 

Los leo por doquier. En individuos de todo tipo, condición, edad y credo. La mayoría, es cierto, seguidores de las nuevas confesiones supuestamente laicas que la religión oficial ha dejado de la mano de los dioses del sentimiento ilustrado.

En el aparente caos de nuevas drogas para los seres que necesitan creer, hay un hilo conductor, supongo que común a todos los caracteres afines a la religiosidad como elemento vital, sea esta cual sea: la dejación de la responsabilidad.

Responsabilidad de todo tipo: con uno mismo, con el prójimo, con lo social, con los actos, con el pensamiento, con la moral....siempre hay un mantra para descabalgarla de los propios hombros. Y así, el rasgo diferencial del individuo se difumina cada vez más en un proceloso marasmo de responsabilidades dejadas y degradación constante. En vez de elevar espíritu, pensamiento y ser, se baja continuamente el listón, pues sin carácter para ser responsable no es posible afrontar con solidez las dificultades.

Pero siempre habrá un mantra neoreligioso que sirva para aliviar la conciencia de no afrontar lo que se debe y descargar culpas en cualquier elemento ajeno.

Patético, sí. Y cada vez más común.

jueves, 28 de septiembre de 2023

Neologismos semánticos del ambiente sadomasoquista. Intenso.

O su diminutivo, intensito.

Intenso es un calificativo que se usa en este ambiente como sinónimo de exceso no deseable, o impostado. El diminutivo tiene el matiz peyorativo de señalar un quiero y no puedo.
Usado preferentemente por la prepotencia mediocre sin sustancia alguna.

No es el animo, claro.

Intensidad bien entendida, como capacidad y no como estilo, es lo que reflejo al señalarlo, por supuesto, como una gran virtud.

lunes, 18 de septiembre de 2023

Trivialidad vespertina

 Eres lo que puedes ser. Lo que vayas a ser es una expectativa, igual que lo que fuiste es memoria. Lo que eres lo condiciona en parte como asimilas ambas.

domingo, 17 de septiembre de 2023

Juntos podíamos ser

 

"Juntos podíamos ser".

Me gusta mucho esa frase.
¡Describe tan bien lo fundamental!

En construcción

 

En construcción....cuántas me encuentro que dicen encontrarse así, y lo que muestran es que están perfectamente bien acabadas.

Qué manía de confundir el ser con la falta de uso.

viernes, 8 de septiembre de 2023

De fútbol, errores y ejemplos

 

Extracto de un artículo publicado el 8 de septiembre, por Andoni Zubizarreta en El País.

"A mí me parece de gran valor, valor añadido en un país donde nadie explica nada de sus procesos de decisión, abrir la puerta de su despacho y explicar todas las dudas, las certezas, los criterios con los que se han movido en este mercado convulso y liquido que es el del fútbol actual. Me parece de enorme valor el aceptar que no se tienen todas las respuestas y que aquello que ayer parecía un problema hoy puede ser una solución.

Si a eso le añadimos la cita a David Hume y recordar la capacidad del ser humano de rectificar, reflexionar e incluso cambiar de opinión, y su humildad para pedir perdón a Sergio, pues qué quieren que les diga. Llámenme filósofo, pero a mí me congracia con el fútbol y su capacidad de poder aportar ejemplos a la sociedad, esa capacidad que creía desaparecida y pensaba que ya era un recuerdo del pasado."

Tiempo

 

“Con el tiempo, aceptas que los demás no son como uno querría que fueran, sino que son como son, igual que tú eres como eres. Hay que aceptarse y no esperar gran cosa de uno mismo. La vida, por suerte, siempre redondea nuestros bordes.”

Nanni Moretti, cineasta.

domingo, 27 de agosto de 2023

(M)Amén

 -¡Feliz domingo tenga Señor!😊
-Claro, en el día del Señor.
-Maaaamen
-Así me gusta, litúrgicamente puta.
-Es que lo de los confesionarios siempre ha tenido su aquel😏
‐Arrodillada en la oscuridad, desnudando lo inconfesable. No entiendo como un sadomadoquista puede ser anticlerical.

sábado, 19 de agosto de 2023

Retorno a lo natural (fin del tiempo)

 

Pensé que dominaba diferentes prácticas, a través de artes diversas. Y puede que fuera así, que el dominio fuera más allá de lo corriente. Hoy sé que acercarse a la perfección formal y técnica es un engaño en sí mismo si no va acompañado del sentido que le da ponerte en disposición de obtener todo aquello que tan elaboradas herramientas permiten.

Hace tiempo que ese dominio de la técnica, las situaciones y la escena superaron el retorno que su uso me está dando. Una mal entendida concepción de la evolución me hizo cometer tal error. Olvidar que no es necesario con llegar al final, sino que basta con saber y poder llegar, y modular a partir de ello el impulso con el retorno.

El crecimiento perpetuo no existe, es la base misma del universo. Nada se crea ni se destruye, sólo se transforma. Pero la soberbia llegó a hacerme creer que poseía la llave de la multiplicación de la energía.

Y nadie la tiene. Aunque más de uno pretenda a hacerlo creer. El atractivo del infinito es inevitable.

Lentitud aislada

 

Me deslizo solo en la piscina, rodeado del azul, la luminosidad del verano y la calma que la masa de agua impertubada me transmite, en un momento de quietud extraña.

Y así, no hay necesidad, deseo, ansia, conciencia.....sólo un estado de consciencia suspendida, la sensación de tiempo a la vez detenido e infinito.

Vengo de disfrutar un encuentro con una promesa de intensidad más figurada que real. Y salgo primariamente satisfecho, pero a la vez, falto de algo; últimamente siempre falta algo.

Ahora, tras la pretensión fallida de devorar toda sensación, es la suspensión acuática carente de intensidad extrema la que me trae los estímulos que no conseguí obtener con la saturación de los sentidos.

Puede que esté buscando un universo equivocado.

Paz

 

El calor desnuda sin preguntar. Ralentiza ritmos, favorece la quietud y destroza los nervios. La veo a través de la puerta abierta del cuarto, plácidamente dormida, como un ángel, en esa postura de paz que sólo le he visto a ella. Y sé que tiene sus demonios (aunque ella cree que son infinitos son pocos aún, es tan joven), su ansia y su dolor de juventud. Pero también sé que conoce la felicidad, y que su sueño no ha perdido esa calma de niña que emana de la quietud íntima de su espíritu.

Espero que siempre conserve un poco, y que nunca deje de dormir así.

La sala de espera

Una citación inesperada me llevó allí, ejerciendo de acompañante. Temprano, de mañana de agosto, los que estábamos sentados respondíamos al patrón de los que ocupan turnos que nadie reclama en un Madrid desierto. Dentro de tres semanas, la masa se pegará por ese espacio, pero hoy casi lo disfrutamos en reposo, sin prisas ni masificación.

Poco podía imaginar lo que me iba a encontrar. Sin esperarlo, me vi ante varias personas que conformaban el arquetipo corriente de aquella con la que en breve iba a tener un encuentro inconfesable. Y ocurrió. Se cruzó la mirada del yo cotidiano con la de la mente del pervertido. Ambas naturales en mí, pero en ese momento, una de ellas absolutamente fuera de contexto. Y esa segunda, perdió. No tuvo oportunidad, ni la más leve, siquiera de pactar un arreglo de conveniencia. Quedó desterrada, sin espacio ni lugar. Y me hizo sentir mal, sobre todo por la sensación que me invadió de estar retorciendo mis dos realidades. No la corriente, que hace tiempo que está inmunizada, sino la perversa e inconfesable, la cual había tomado sin ser consciente de ello una deriva que no se corresponde ni con mi capacidad ni con mi deseo.

El más y más no es un valor en sí mismo, siempre lo he sabido. Pero hasta ese momento de reflexión en la sala de espera no me había dado cuenta de que éste me había llevado más lejos de dónde soy capaz de ir y asimilar. Afortunadamente, una cita inesperada me ofreció el momento de verlo con mis propios ojos en un contexto neutro. Y pude evitar cometer un error de los que dejan huella indeleble. Y en este caso, habría sido indeseada.

No hay mal que por bien no venga, es verdad.

 

sábado, 12 de agosto de 2023

La seguridad del Dominante

Es un tema recurrente, como todos los que confrontan una faceta deseable en un rol con las cualidades apreciables de una persona genérica sin entrar en sus matices especiales.

Me refiero en este caso a un post irónico sobre los complejos y la tendencia a no mostrar ni estos ni su inseguridad por parte del Dominante.

Las aportaciones subsiguientes siguen el espíritu del hilo, dando por buena la conducta y carácter que deja ver uno o ambos defectos, atributo quizá deseable en cualquier persona. Pero, por supuesto, en absoluto válido para un Dominante. Una vez más, un mal entendido buenismo personal pervierte la concepción de los atributos que debe poseer un rasgo concreto de la personalidad. Rasgo, no olvidemos, contenido en un ámbito concreto de una relación especial, en este caso una relación D/a.

He de negar la mayor. Si algo han esperado siempre, sin duda y sin excepción, todas las personas con las que he establecido una relación de Dominación, ha sido precisamente eso, el tener la certeza de que están en buenas manos, y eso ha implicado implícitamente el que el Dominante sea un referente en cuanto a autoridad y confianza. Lo cual inevitablemente requiere sentir coherencia y seguridad en su carácter y proceder. Y siempre han esperado hallar eso en mí.

Cuando en ese proceso de creación de la complicidad han percibido dudas, inseguridad o debilidad de carácter, la relación se ha resentido, o venido directamente abajo.

Eso no quita para que en paralelo se hayan sentido más cómodas sintiendo que la parte genérica de esa persona pueda llegar a ser capaz de expresar duda, o cierta inseguridad.

Sé que voy en contra de la corriente general y de toda esa estéril y pueril consideración unitaria entre el rol y la persona. Por ponerlo en una frase de fácil comprensión, siempre esperan que el Dom sea un cabrón, y la persona se de fiar.

Parte del aroma del cabrón es no dejar ver ni intuir jamás la debilidad del complejo y la inseguridad. El resto es literatura rosa. Y para eso, hay otros lugares más adecuados.

 

lunes, 26 de junio de 2023

Sal ya de mi cabeza

 Jajaja, pobre ilusa.

Aún no te has dado cuenta de que me perteneces para siempre, que tu deseo de ser como has imaginado solo es posible de mi mano.

Eres una esclava sin posibilidad de huir. Bueno, tienes una, que encuentres a otro Dueño que te haga ser como lo hago Yo.

Y eso ya sabes que no va a pasar.

lunes, 12 de junio de 2023

Estímulo favorito

¿Cuál es tu estímulo favorito, lo que siempre despierta tu deseo?

No tengo estímulos favoritos de nada. Aparece cuando algo me hace vibrar.

Los egos insufribles

Leo un status que me parece pretencioso y muy desafortunado. Dice de esta manera:

“He tomado la decisión de contestar de forma clara y asertiva a los comentarios y mensajes chorras que recibo.

Quizás me haga una rancia, pero prefiero menos interacciones, pero de más calidad.”

Contesto así

Educación => rancio. Curiosa premisa para considerarse asertivo, sí. De la implicación que deviene del estado anterior a la decisión, casi mejor no profundizar demasiado.

En todo caso, a pesar de lo implícito en el mensaje, es motivo de celebración ver una profesión pública de fe en la cortesía, las buenas maneras y el saber estar. Espero que cunda el ejemplo.

sábado, 10 de junio de 2023

¿Ha cambiado mucho Fetlife?

Me preguntan, al ver que llevo unos cuantos años dado de alta en la página.

La respuesta es que sí. Sí, mucho. Antes era un punto de encuentro de sensibilidades cercanas al sadomasoquismo, con los conceptos medianamente claros y el enfoque también. Ahora es una red social de amplio espectro contaminada por facetas ajenas, accesorias, que priman sobre los aspectos esenciales del dolor, el fetichismo, el poder y su relación con el sexo y el placer.

Se ha convertido en una especie de facebook para inadaptados, acomplejados, débiles, enfermos, oportunistas al dictado de modas sociales y elementos carentes de autoestima o prepotentes ególatras sin sustancia detrás.

Sobre todo en España. Véanse las exclusiones de individuos sectarios en el pacto de las izquierdas para las elecciones generales. Aquí queda pendiente una limpieza similar.

martes, 6 de junio de 2023

La felatriz natural

 Tiene un encanto especial. Una mujer que sonríe cuando le dices cosas tales como:

“Vaya, vaya con la niñita....te encanta tragarte las pollas hasta la garganta ......así te encuentras en tu sitio....y no es una sorpresa, no.”

o

“Por tragarte una polla eres obediente, complaciente y no te importa degradarte. Al contrario, te pone. Te pierde el placer de recorrerla con la lengua, abarcarla con los labios y notar como crece en tu boca. Saborearla, notar el calor y la tensión.

De la punta a la base, hacerla desaparecer y después pasar la lengua despacio, y alternar ambas cosas”

y no sólo regala su sonrisas leerlo, si no que responde así:

“Me encanta, sí. Creo que el sexo oral es mi preferido. Adoro dar placer con mi boca, o que la usen para dárselo. Le pongo pasión y ganas, porque me gusta.”

y así,

“Por supuesto que sí. Recorrerla toda, de hecho. Obvio, también lamer los huevos“.

Pero lo mejor de todo no es la disposición, el talante o el ánimo. Es la sensación de naturalidad que emanan las respuestas, sin ironía, sarcasmo, lascivia incontrolada, prepotencia sobrada o descaro improcedente. Nada que ver con eso. No le hace falta. Transmite el gozo que le representa tragar pollas y dar placer del mismo modo que te contaría lo que le gusta escuchar una canción o tomarse un helado. Y en este entorno cada vez más suspicaz y crispado, es tal su frescura, que es imposible no acompañarla en la sonrisa.

Y la idea de tenerla en ese instante acunada entre los muslos se vuelve en lo más natural del mundo. Parece contagioso. Desde luego, es delicioso. Divina felatriz natural.

sábado, 27 de mayo de 2023

De pedradas y lanzadores de piedras

 

Que uno sea capaz de comprender que alguien pueda tener una pedrada no implica que por eso deba respetar el comportamiento y las consecuencias de los actos de quienes también la tienen. Menos aún si los efectos se dan en ámbitos muy separados del que afecta el propio (para los obtusos, en este aserto ámbito equivale a bdsm, sin más letras ni siglas).

Por eso no entiendo esa solidaridad entre tarados y chalados diversas. Eso no se daba en los frenopáticos, por lo cual no es obligado que se observe aquí, delicioso redil de enfermos con alguna que otra región cerebral lapidada.

Para los que os creéis normales, no aplica. A esos, las reglas de urbanidad y sociales comunes y el código penal a rajatabla, como es procedente con cualquier ciudadano que dice obrar sin el efecto de pedradas.

viernes, 26 de mayo de 2023

Pelirroja....y más

Cuando la vi llegar, me encantó, claro. Pues, ¿a quién no le agrada que se le aproximen varios de sus fetiches? El pelo rojo, encendido, enmarcaba una mirada azul, sostenido por la piel clara que la blusa trasparente dejaba algo más que adivinar. Al aproximarse, además, los bultos indisimulados de los pezones, evidentes aún bajo la tela del sostén, completaron un cuadro visual que ni siquiera habiéndolo descrito con anterioridad habría podido ser más atractivo.

Con todo, lo mejor está en el interior. Donde debe estar, justo detrás de la mirada celeste, bajo la melena colorada, fluye todo aquello que da sentido al envoltorio. Así, el estímulo no se atenúa tras el goce de la vista y la suavidad del tacto.  De ese modo, a la hora de la verdad no depende de aspectos más contingentes que otra cosa, por mucho fetiche que contengan. La conversación, el lenguaje corporal, el carácter y la disposición que va aflorando prometen algo más, mucho más, que placer para la vista. Es más, una vez la imagen visual ha sido creada, difícilmente tendrá un recorrido que aumente en profundidad e intensidad, si no aúna otras características y la capacidad para ser lo que el deseo dibuja desde esa imagen que mezcla rojo, azul y palidez. Y se da. Pues además, es tan puta, pero tan, tan puta, que es complicado ofrecer una medida de hasta dónde puede llegar. Puta, masoquista, con carácter y coherente, consciente de ello y dispuesta a hacer disfrutar a quien ponga de manifiesto tan deliciosa condición en todo su esplendor.  

Eso pienso hacer, naturalmente. Hasta que el rojo brillante que la corona se funda con el fuego incandescente que fluye del interior sin que ella pueda tener ni un átomo de control. 

Y más.

sábado, 20 de mayo de 2023

Incoherencias pseudo intelectuales (la explosión de la verdad)

 

Desconfío de las explosiones de verdad , porque la verdad no explota, subyace. Y no es única, depende de las circunstancias. Eso jode a los individuos, que parecen estar necesitados de reglas inamovibles para poder navegar en cualquier entorno. Y me hace gracia infinita que en este lugar, en el cual se hace pública profesión de renegar de etiquetas, de ser diferentes y de huir de quienes aplican recetas se aplauda de manera unánime a quienes explotan en verdades, se reconocen esencias universales y muestran comportamientos de pública aceptación.

Sí, hoy he vuelto a leer un texto mentiroso envuelto en una pátina de autenticidad brillante y soportado por los inobjetables adalides de la modernidad incuestionable. Una casta que viene a redimirnos de castas antiguas y que a mis ojos no dejan de ser un quítate tú para ponerme yo. Perros con distinto collar, esclavos del aplauso de una masa que entre ellos desprecian y sin embargo todos conforman.

Debería obviarlo, pero esta tarde no me dio la gana hacerlo. Mañana, será otro día.

Por Dios, qué asco me dan.

jueves, 11 de mayo de 2023

Desprecio

 

Pocas cosas pueden hacer que sienta más desprecio por alguien que este trate de usar a terceros para justificar faltas y su propia incompetencia. Y si encima utilizan a elementos ajenos para aumentar el eco, apaga y vámonos.

Es un comportamiento vil, deleznable, propio de una baja condición.

Ya sé que es algo muy común aquí, pero siempre espero que no se me acerque mucho. Pues despreciar a quien se tuvo en alta estima es de lo más doloroso.

Supongo que cuando la inmundicia prevalece alrededor es casi imposible permanecer impoluto. Qué se le va a hacer.

martes, 9 de mayo de 2023

Sí, sí hay guías

Este texto surgió como reacción a una de esas lecturas tendenciosas y buenistas que tanto abundan por el universo de las redes sociales sadomasoquistas. Esta en concreto, como casi todas, antepone la legitimación por sentimientos de una idea peregrina (no hay otra guía que mis sensaciones). Solo deseo ver al autor en manos de un psicópata, a merced de los sentimientos del mismo.  

Bonita oda a la improvisación. Magnifica como caja de resonancia al comportamiento conductista basado en la emoción, y a la supuestamente encomiable capacidad de caer y levantarse.

No sé, no sé. El conocimiento proviene de la capacidad de aprender al estudiar, observar, deducir, pensar. No sólo del método de prueba y error. Como alegato voluntarista está muy bien, pero como base para una persona que debe tomar control, decidir, determinar, poseer, guiar y ejercer dominio, me parece un brindis al sol.

Jamás me pondría en manos de alguien cuyo principal valor sea la buena intención. Menos aún si esa persona debe llevarme a superar mis límites ampliando mi percepción haciéndome consciente de mi verdadera capacidad a la vez que me genera los estímulos adecuados. Eso requiere mucho más que buen corazón. Incluso, en ocasiones, el corazón, sobra.

No, no hay olé ni violines, por muy guay que quede. Pero probablemente estemos hablando de cosas diferentes.

lunes, 1 de mayo de 2023

De demonios y placer

No tengo demonios. Al menos, no soy consciente de ello. 

Lo que poseo es una faceta inconfesable que ama el placer, que muy pocas personas pueden hacer brotar.

Posiblemente, seas una de ellas.

miércoles, 26 de abril de 2023

Soberbia simétrica

Es algo curioso, y además, se suele tener como algo asimilado por defecto. Me refiero al asunto de los "méritos". No hay pretendida ni pretendiente a sumisa que ante un sondeo por la parte dominante no suelte la letanía del "no soy sumisa de cualquiera, sólo de quién me domina (somete, controla, puede conmigo etc, etc) y lo merece".

Dejando de lado esa otra "discusión fundamental" de si el pervertido nace o se hace (suelen suscribir lo primero, con lo cual la potencial incoherencia está ahí, pues esencialmente "son" pero no cualquiera les puede hacer ser....) descansan en su propia voluntad y apreciación la capacidad de ser (con lo cual, los cientos de escritos que plañideramente acusan a los desalmados dominantes de engaño y traición son teatro, pues las dolientes escogieron por meritocracia irrefutable...)
...que me voy del hilo, conceden la gracia al cómplice adecuado, méritos mediante.

Cualquier otra opción no existe. A quien el sumiso señala con infinita precisión le es otorgada la gracia de la relación, y ya.

El mérito, capacidad y por supuesto valor de quien se entrega son incuestionables y base única y necesaria, además de supuestos también, y ya está todo dicho.

Pues......va a ser que no.

 

viernes, 21 de abril de 2023

Debilidad emocional vs manipulación

O de la adaptación al medio de las nuevas generaciones.

Leo esta frase en un foro:
"Estamos ante una generación emocionalmente débil, donde todo deber ser suavizado. Por que "todo" es ofensivo, incluida la verdad."

Y respondo así a quien la publica:

"No, no te equivoques. No es debilidad. Es manipulación. Desde hace tres o cuatro generaciones, los venimos educando (mea culpa por la parte que me toca) en la oferta, en la cesión y la comodidad. Y en consecuencia, eso buscan y eso son expertos en procurarse. Si a una persona le han estado diciendo toda la vida "quieres esto, te gusta esto, te apetece esto” pues se cría considerando que la vida es así. Es diferente al “haz, toma, ve a”. Si encima no hay competencia de hermanos, familia o amigos (antes éramos 3 ó 4 por adulto, ahora hay reuniones familiares de 10 adultos y un crío. Bueno, y los perros) pues la orientación está clara.

Ya van llegando a puestos de responsabilidad y decisión, y ya va quedando claro las habilidades sociales que les adornan. Cuando sólo queden ellos al mando, va a ser divertido verlos despedazarse para satisfacer lo que "quieren, gustan, apetecen”. Si no acaban con todo antes."

Sicalipsis en blanco y negro

 

No está mal, como elemento sugerente, o declaración de intenciones. Aporta un aroma fetichista que realza el estímulo perverso. Quizá sea por su falsa naturalidad. Así, es impagable como fuente de un deseo intangible, imaginado, artístico, onírico.

Pero, como toda la excitación estética, pierde ante el estímulo en vivo. Pierde, pues rara vez la fantasía parcial se materializa en plenitud. Al hurtar elementos perceptivos, que en el acto consciente van a estar ahí, es difícil que proporcionen más satisfacción que la emulación puntual generada de la imitación de un icono.

Quizá es lo primero que hay que distinguir, la fantasía basada en un elemento perceptible por los sentidos de la creada en la imaginación ajena a formas concretas, o dicho de otro modo, basada en sensaciones y no en percepción sensitiva. Porque lo sensitivo no se puede modelar, los sentidos transmiten fielmente. Al contrario, lo que apela a sensaciones producidas en el cerebro y generadas por él (dominio, humillación poder, obediencia, mando) no tienen patrón físico que las pueda desmentir por comparación.

Por supuesto, hay grados, y personas capaces de disociar la sensación percibida de los sentidos de la imaginada. Pero en mi experiencia, son los menos. Y yo no tengo esa capacidad entre mis habilidades.

Por eso, distingo entre excitante y posible, en mi estrecho margen de disociación. Y así, para mí el blanco y negro no deja de ser un estímulo alentador sin mucho más recorrido que el de mero catalizador en alguna situación puntual. La satisfacción del espíritu artístico queda aparte, claro está.

sábado, 15 de abril de 2023

Al final no lo pudo asimilar

Una pena, tan puta como es, con esa cualidad intrínseca tan rara y difícil de hallar. Realmente, es un portento diluido en una mente estúpida, puede que enferma también, que no ha sido capaz de asimilar su condición dentro del ámbito adecuado.

Llevará una cruz, no volverá a disfrutar del placer como lo ha llegado a conocer. Una pena, pues se lo puse fácil, sólo debía renunciar a manejar su voluntad en los momentos que yo decidiera. Que son los mínimos, viendo lo que da de sí. Pero le faltan tantas luces que ni siquiera fue capaz de valorar el leve peaje que tenía que pagar.

Habrá quien lea esto y considere que la exigencia era mucha. Y visto desde fuera, y sin un enfoque coherente del deseo manifestado, podría parecer así. Pero no lo es tanto cuando has conseguido hallar una explicación a eso que te ha atormentado durante años, y se te ofrece un entorno seguro donde poder desarrollarlo. Quizá, esa seguridad, ha dado la falsa sensación de que a pesar de sentir esa subordinación absoluta, de alguna manera, podía aún mantener y ejercer cierto control Y no, no lo tenías, ni lo ibas a tener. La única opción era confiar, asimilar y obedecer. 

 Demasiado para ti, desde luego. Y casi para cualquiera desde hace ya unos años. 

 No se puede estar a misa y repicando, ¡qué se le va a hacer!

La realidad imposible

Crees que quiero poseerte. Someterte hasta el punto de que dejes de pensar y solo puedas sentirte bien sabiendo que me complaces, que existes para darme satisfacción, y además, sin que puedas evitarlo. Piensas en ello como una posibilidad improbable, imposible, fantasiosa. Vamos, a ti, con tu carácter y fortaleza, nadie te lleva por donde no quieres, y aunque quieras, no es posible encaminarte por donde decides no pasar.

Así pues, me miras de un soslayo casi divertido cuando escuchas que no es que lo quiera, es que lo voy a hacer, y además, si me apetece, no habrá forma de que puedas evitarlo. Aunque mi semblante es serio, también me divierte, y comienzo a disfrutar cuando apenas un breve instante después de posar tu mirada puedo ya apreciar que algo en ti te dice que esa realidad imposible que te hace sonreír maliciosamente ya no es tan descabellada.

Apenas unos meses después, sigues sonriendo. Pero ya no puedes mirarme a los ojos sin agachar la cabeza, y sabes que lo imposible, a mi lado, ha dejado de existir. Te alegras de haber subestimado el peligro.

Divina y tangible realidad. Absolutamente posible, al final.

sábado, 8 de abril de 2023

Entorno irremediablemente vacío

Muchos son capaces de admitir que efectivamente está vacío.

Pero nadie se atreve a reconocer que es irremediable.

A pesar de que todos saben reconocer la verdad

jueves, 6 de abril de 2023

El placer de la corrupción

 Decía que no casi todo el tiempo, pero sus actos la contradecían.

Me gusta sentir el placer de verla traicionar aquello que más le importa.

martes, 4 de abril de 2023

A punto de...

A punto de abrir la puerta al cuarto oscuro, tan oscuro que no te hacen falta los ojos. Y aunque parezca que el clítoris es la guía, no es más que la consecuencia lógica al estímulo que une el nudo de tu vientre con la hiperexcitación de las neuronas, en un arco tenso que te impide quedarte bajo el marco.

Pues aunque no ves nada, ni sabes qué te ha de ocurrir, eres perfectamente consciente de lo que vas a ser. Y no puedes dejar de ir.

Curiosa forma de sentirse obligada sin ser exigida. La divina fuerza de la inevitabilidad. Hasta el palpitar del clítoris te manda. Y estás.......a punto.

lunes, 27 de marzo de 2023

Una lectura refrescante.

De un frescor limpio (sí, limpio, aunque me haya hecho mirar a lo más profundo de mi suciedad esencial). Un frescor tan limpio que consiguió que dejara de mirarme el ombligo y alzará la vista al espejo. Ese espejo que no quiero mirar, porque sé qué imagen me devuelve, y hace tiempo que no me gusta nada. Pero nada de nada.

Hasta hoy, pues de nuevo pude ver aquello que antes saltaba a la vista sin apenas poder ocultarlo. Eso que yo sé que está ahí, y que creo tan potente y deseable que no acierto a comprender cómo no vienen en tropel a quitármelo de las manos.

Pero la verdad es que hace tiempo que ya sólo yo sé que está ahí. Que ya no se ve, y ademas, como bien claro deja el maldito espejo, ha dejado de tener un envoltorio lo suficientemente agradable como para aventurarse a investigar bajo el manto que se deja ver.

A veces, basta un click para despertar. Espero que esta sea una de esas ocasiones. De verdad, de verdad, de la buena.

La cadencia del tiempo

El paso del tiempo suele ser usado como justificación, aunque se enuncie de modo explicativo. Su devenir inmutable, al menos en nuestra dimensión actual, con su aura de invariabilidad, le convierte en un culpable excelente de faltas ajenas.

Pero no es el tiempo quien fija caducidades, dicta o deroga normas, ni modifica ritmos ni conciencias. Son los propios procesos que montan sobre él, y la capacidad de adaptación a lo nuevo, o la de desacoplarse de lo conocido que ya no tiene razón de ser.

Cadencia que sirve de aviso, mensajera de cuitas inevitables, precursoras del fin último. La muerte vino de la mano del sexo, de su faceta reproductiva generadora de seres nuevos. De la mano de la complejidad, que tiene en la mente su más conseguida obra por el momento, vehículo hacia las más altas cotas y testigo de los mayores desplomes.

Lamentar poseer aquello que acabará contigo es un modo verlo. Disfrutar de lo que te permite alcanzar lo inimaginable es otro.

Me quedo con lo segundo.

La generación digital abjura de su medio

Desde luego, tienen los cojones como melones. Después de arrasar al dar un uso de red social de amplio espectro a un medio que fundamentalmente era un punto de encuentro de sensibilidades perversas, en el cual, salvo los habituales listos, prevalecía una naturalidad compartida sin mucha impostura; después de contaminarlo, envilecerlo y envenenarlo, comienzan ahora a denostar el estado en el que se encuentra, por no poder confiar en quienes se muestran, o no ser capaces de extraer la información intangible necesaria de quién está al otro lado.

Se cargan el canal, y ahora empiezan a querer mudar a otras formas de relación. Aquellos, los que decían (¿lo seguirán diciendo cuando algo no les cuadre?) que esto era un escaparate abierto y que "ese" era el modo de uso aceptable, ante la corrupción que el uso que propugnaron nos trajo, denuncian aquello que ellos mismos han creado.

Y se quedan tan anchos. Lo dicho, como melones los tienen. A ver si desertan pronto, joder.

miércoles, 22 de marzo de 2023

Perversiones aireadas

Tanto deseo de normalización, consciente o inconsciente, definitivamente, ha hecho perder el foco. Y da lugar a conductas difícilmente asimilables en un lugar de encuentro calificado a sí mismo como kinkster, o de pervertidos, por usar una acepción clásica en español.

De este modo, se ha convertido en algo relativamente común que los detalles de una conversación privada con propuestas o en la que se manifiestan deseos ciertamente extraños, sea hecha pública, las más de las veces, con ánimo jocoso e indisimuladamente prepotente, con aroma a auto de fe.

Es un error. Un lamentable error. Cuando a alguien, por la causa que sea, le es ofrecida una fantasía o incluso lo que pueda parecer una aberración, de un modo privado, no tiene derecho a convertirla en mofa de mentidero, por muy disparatada que pueda resultar. Porque se da en el ámbito que se da. Si por lo que sea, el receptor la considera inapropiada, basta con hacérselo saber al remitente, y si éste no respeta que su confidencia no se aprecie o que se decline su oferta (por decirlo de algún modo), úsense los canales que ofrece la página, y si se percibe riesgo, comisarías y juzgados.

Pero hacer, insisto, en este ámbito, de una perversión confesada, objeto de chanza general, me parece una bajeza inaceptable. Por mucho que se pueda estimar que es una ironía fuera de tono, una broma, un desafío o una tomadura de pelo, y aunque así lo fuera. Confesar una fantasía íntima, un deseo imposible, una aberración onírica, no es fácil, y suele requerir apreciar un mínimo de mirada cómplice. Hacer de ello una gracia de conventillo para que los paladines de la estupidez vuelquen su pretendido humor insufrible a modo de picota moral pretendidamente ingeniosa es de lo más bajo que se puede caer. Y desgraciadamente, parece que se ha convertido ya en norma del lugar.

Como me dijo una buena amiga hace ya muchos años, en verdad somos muy pocos, y los buenos están ya cogidos. Va ser eso, y sigue teniendo razón, sí.

miércoles, 15 de marzo de 2023

La putita iluminada

Érase una vez una putita que se quiso pasar de lista. Con premeditación y aire de sobrada. En la errónea creencia de que poseer un coño y dos tetas junto a una excesiva querencia a darles uso le concede una herramienta para obrar a su antojo, trato de pasarse de lista. A pesar de ser idiota, lo intentó.

Y claro, no funcionó. Se pasó tanto, que la idiotez la desbordó y se volvió contra ella. Bueno, siempre se vuelve, pero es tan limitada que nunca parece apreciar lo que le ocurre.

Pobre putita, se ha quedado solita con sus tetas turgentes y su coñito ahora seco. Supongo que nunca aprenderá. Es una lástima, pues como puntita vale. Como otra cosa, no.

En fin.

 

lunes, 13 de marzo de 2023

Corrupción

La vida es esencialmente corrupción. Todos de alguna manera estamos corrompidos. Desde el nacimiento.

viernes, 10 de marzo de 2023

Elogio de la paciencia

Paciencia, paciencia....discreta paciencia. La persistencia impertinente es tan agotadoramente aburrida, tan poco estimulante......abrasa cualquier brote de fluidez o complicidad. Sí, la obligación se lleva fatal con el placer, la sonrisa y el disfrute, salvo quizá para cierta mentalidad luterana, que no es mi caso, ni creo que el tuyo.

Aunque al impulso innecesario más que una virtud le parezca la coartada del carácter poco decidido, en realidad, bien entendida, es la expresión absoluta de la confianza en uno mismo.

“Sometimes nothing is a real cool hand” Cool hand Luke

lunes, 6 de marzo de 2023

¿Por qué?

 

¿Por qué estás haciendo esto ? Porque no quieres evitarlo.

Aunque sería aún más estimulante si ocurre porque no puedes evitarlo.
El impulso queda más allá de tu control.

Divino. Y para ti, aterrador. Deliciosamente aterrador.

viernes, 3 de marzo de 2023

¿puede un sumiso guiar a un dominante?

La palabra mentor tiene una carga místico-comercial-de-moda insufrible, pero obviando el envoltorio, sí, un sumiso experimentado es perfectamente capaz de orientar a un dominante en ciernes a orientar su conocimiento, observación y práctica. Experimentado, que tenga una base sólida de conocimiento basada no en la emoción y las sensaciones como fuente, si no con el contraste de las mismas a través de la asimilación que procede del análisis intelectual de la experiencia.

jueves, 2 de marzo de 2023

Hoy tenía el día torcido

Hoy tenía el día torcido. Estropajosamente torcido. Hasta que por azar, posé la mirada en la rectitud que sólo una mirada oblicua puede desentrañar. Y entonces, todo la incomodad del desorden obligado dio paso a la placentera sensación que habita exclusivamente entre las líneas que me susurran las obscenidades de una complicidad superior. Y el resto de mirones ni siquiera lo puede intuir. Me palpo entre las piernas y veo la inevitable erección. Divinas palabras, sí.

Los desechos de tienta de la normalidad

Desde luego es mala suerte.

Habiendo tanto espacio en el metaverso, tantas posibilidades, tanto hueco para piezas únicas sin espacio, ¿por qué ha tenido que ser el universo del BDSM el que haya tenido que acoger a las piaras de elementos sin adscripción definida? Si la base es muy sencilla, dominio sumisión, dolor, sexo y placer. Aunque se difumine a veces en los extremos, y los genuinos seguidores sean raros por escasos, hay otras disciplinas que acogerían con más coherencia a tanto desecho de tienta de la normalidad.

Pero no, han tenido que venir aquí. Habiendo tanto universo para raros, se adhieren a l que hay aquí. Y no contentos con eso, se quieren quedar con la bandera. La verdad, es que los trapos me dan igual, que se lo cosan a la piel si quieren. Pero de ahí a admitir que me quieran hacer comulgar con ruedas de molino......pues no.

De los cruces con mala casta solo se puede esperar descendientes degradados, por mucho que por las leyes de la genética pueda surgir de modo excepcional algún ejemplar extraordinario. A ver si encuentran otro gueto para visibilizar, van a aparearse allí y nos dejan pronto en paz. Pero me temo que me moriré antes de verlo.

Supongo que estoy harto de marrajos que exigen que las cargues la suerte cuando no valen ni para una faena de aliño. En fin.

miércoles, 1 de marzo de 2023

De retos y fluidez

Un reto.....no, los retos son para los que no tienen iniciativa y necesitan que tiren de ellos. El estímulo de la mediocridad.

Mejor que seas un conjunto de posibilidades. Que la capacidad de ser sea el estímulo necesario para hacerte ser. Sin metas, fluyendo. Los objetivos se acaban, el desarrollo es más constante.

Quizá sea lo primero que has de descubrir. Pero la infinitud asusta, avisada quedas.


lunes, 20 de febrero de 2023

Contrastes (el placer del observador)

Por supuesto que no es nada personal, aún no puede serlo, no nos conocemos, y como mucho podría tratarse de un prejuicio, aunque no parece tener el carácter que tienda a prejuiciar alegremente.

Pero no escribo hoy por eso, si no por uno de sus contrastes. Qué se le va a hacer, me gusta observar, y cuando se dan paradojas en el universo observado, sean aparentes o no, la realimentación hace que tienda a mirar de una manera casi compulsiva, si no fuera por la paciencia que requiere contemplar y asimilar todo lo que entra por los ojos y quiere descubrir la mente.

La última de sus imágenes induce a pensar en una piel sedosa, suave, fina. A juego con la morfología de su cuerpo (aunque en una orientación clásica ese tipo de pieles suele asociarse a físicos voluptuosos, propios de perfumadas odaliscas sugerentes. Modas de otros tiempos, desde luego). Como decía, una dualidad muy actual de cuerpo-piel, que contrasta abiertamente con la dureza de las facciones de su rostro. Rasgos duros, delineados, firmes, casi violentos, enmarcados en el aura de fragilidad del cuerpo que los eleva.

Y claro, al amar el placer que procede de los contrastes y las paradojas aparentemente imposibles (entre otras cosas) no puedo dejar de escribirlo, aunque pueda quedar la oda a esta singularidad perdida en el vacío. Oda que con certeza no acaba en tan dual apariencia, pero eso, si llega, formará parte del resto de la historia.

El deseo del observador paciente y hasta ahora callado.

sábado, 18 de febrero de 2023

Designio conminatorio

Despierta, ánima de efluvios septentrionales,
depositaria de arcanos impulsos perversos, 
fuente de placeres inconfesables,
la mayoría aún por aflorar 
a los surcos de tu piel en forma
de marcas visibles como testimonio material
de tanto deseo escondido.


No te pierdas en el éter cibernético 
y acude ante quien te reclama como tributo 
de la orgía de sensación e intensidad 
que ensucia tu mente para limpiar tu alma.


Ven, ofrécete y vive lo que aún no sabes si puede ser real.
Ven a que lo haga ser contigo para ti y para mí.

Despierta para tu nuevo Dios.



miércoles, 15 de febrero de 2023

Es puta

Descubriose puta.
Se siente puta.
Incluso se sabe puta.
Lo sabe con tanta certeza que le duele serlo.
 
Pues no es capaz de asimilar aún que es puta, tan puta.
 
Tan puta que transciende su carácter manipulador y dominante.
Tan puta que se convierte en un pelele en manos de quien le hace serlo.
Tan puta que nota que pierde su dignidad.
Tan puta que sabe que no puede negarle nada.
 
No puede evitarlo. 
 
Ser puta la ha marcado.
Ser puta la condiciona.
Ser puta la vuelve loca, lo odia y a la vez le encanta.
Ser puta le provoca mil preguntas, pero sobre todo una.

¿Por qué?
 
¿Por qué me pasa esto?
¿Por qué no lo puedo evitar?
¿Por qué le busco?
¿Por qué me domina así?
 
Y así, ya no tiene placer sin Él, 
no tiene deseo sin Él, 
no goza sin Él,
ni siquiera es capaz de excitarse si no se lo permite Él.

Es puta.
Muy puta.
Tan puta.
Irremediablemente, puta.

Y, sobre todo, Su puta. 
Por, para y gracias a Él.