Otros son exhibicionistas, algunos prepotentes, aquellos soberbios, estos descarados, los de más allá arrogantes y algunos, a mayores, vanidosos. Son diversas intensidades plasmadas de los egos desbocados. Mas la wikipedia esta vez me apuntó el matiz que buscaba, sin encontrarlo:
"La vanidad se define como la creencia excesiva en las habilidades propias o la atracción causada hacia los demás. Es un tipo de arrogancia, engreimiento, una expresión exagerada de la soberbia. De acuerdo a la teología cristiana clásica, la vanidad consiste en depositar la confianza en forma excluyente en las cosas mundanas, lo que hace que el hombre no necesite de Dios. Es considerado muy a menudo como el «vicio maestro»."
Creencia excesiva en la habiliades propias. Sin necesidad de Dios.
De todos modos, no es lo mismo pues ser vanidoso que parecerlo a los demás. Ser o no ser.....
Puede que lo sea. O tan sólo lo parezca. O ambas cosas. Depende del día. Pero escuchándolo cantado así, parece un regalo divino. Al menos, alguna que otra vez. Aunque se obvie a Dios. Que no al Señor.
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