"Arrebátemelo todo, ya no necesita mi permiso.
Marcada la piel. Marcada el alma."
Un lugar imprevisible.
Casi más allá de toda intuición, allá por el mes de agosto,
cuando tras los cruces de las primeras palabras se iba conformando algo diferente.
Es una sucesión de salidas encadenadas, al ritmo de la realimentación que nos envuelve,
fruto de su asombrosa capacidad de asimilación,
una inagotable curiosidad,
un deseo que parece infinito,
todo o nada,
y más, y más y más....
me empuja,
estimula,
provoca,
complace,
sorprende,
agrada,
aplaca,
enardece....
Y saca de mi un yo aún por descubrir
Cada día, en una nueva línea de salida.
Inevitablemente
No hay comentarios:
Publicar un comentario