lunes, 2 de enero de 2012

Natalia

Natalia quiere jugar. Ella no lo sabe, pero quiere jugar. Por alguna razón, selecciona un perfil, anónimo, que le llama la atención. Vence sus temores, y establece contacto. Comienza a hablar, y poco a poco, muestra sus deseos a un desconocido. Dentro del nerviosismo, se siente cómoda, y le cuenta....más con lo que calla que con lo que dice. Pregunta, quiere saber. Le cuentan, y se ve retratada. Cada gesto delata su estado, pura tensión, nerviosa..y sexual.

Está mojada....muy mojada, tanto, que ha manchado las medias.

Ahora se encuentra ante su ordenador, sentada, en su puesto de trabajo, con las piernas abiertas, la falda del fino vestido subida y su mano en su sexo. Sus compañeros no saben lo que está haciendo, aunque si la miraran percibirían su intenso rubor. Media hora atrás no habría sido siquiera capaz de imaginarse así.

La excitación es alta, no quiere saber más, prefería irse. No sabe como calmar su ansia. No es capaz de pensar con claridad.

"Antes de irte, ve al servicio y mastúrbate"

Uffffff......

Esa fue su última palabra. Ufffff.....

No hay comentarios:

Publicar un comentario